núm. 11 (2020)

How do I relate to the one that’s different than me? With anger? With hatred? Or, perhaps, with compassion? These are looming questions that seem crucial to our comprehension of one of the most relevant novels written by women in Britain during the XIX century, Wuthering Heights, by Emily Brontë. We thus ask the question, how is the Other constructed in this novel? Because the differences of class and race result not only in the exclusion or alienation of those who are different than I, but in the construction of a whole discourse regarding that identity, which manifests in several ways. Thus, in Wuthering Heights, the way both Heathcliff and Hareton are subjects of a discourse of alterity, throws them into the process of becoming the Other. Alterity, as we are to understand it in this essay, is the process of the construction of a discourse that alienates these characters throughout the development of the novel.

En la actualidad, se estima que existen en el mundo cerca de siete mil lenguas1, cuyas estructuras lingüísticas pueden dar cuenta de las diversas posibilidades cognitivas humanas, así como de las motivaciones socioculturales detrás de dichos sistemas simbólicos. No obstante, debido a factores políticos, sociales o económicos, algunas de estas lenguas se imponen por encima de otras, condenándolas a un progresivo desplazamiento. Ello implica que las primeras provoquen una interrupción en la transmisión del conocimiento de las segundas, lo que lleva a experimentar procesos de asimilación cultural y homogeneización lingüística, y que se refleja en una proporción desigual entre el número de lenguas y su cantidad de hablantes.

Ante la preocupación en Iberoamérica en torno a los bajos índices lectores de la población, se evidencia el interés de algunos adultos (padres, madres, docentes, gestores culturales) por hacer que niños y niñas lean. Los gobiernos de la región han aunado esfuerzos y creado políticas públicas para potenciar los hábitos lectores: planes nacionales de lectura, leyes del libro y de otros marcos jurídicos y normativos que contemplan acciones para fomentar la práctica de la lectura y democratizar el acceso al libro, cualquiera que sea su formato (Cerlalc, 201, p. 19), lo que hace cada vez más visible la introducción del libro en las esferas públicas y privadas. Estos programas evidencian el surgimiento de nuevas propuestas de animación y promoción de lectura que buscan hacer atractiva la literatura en los más pequeños. Sin embargo, pese a la emergencia de nuevas estrategias, la lectura sigue estando relegada solamente a los espacios escolares. En este sentido, ¿cuál es el papel de los padres en la formación de la sensibilidad literaria de sus hijos? La respuesta pareciera evidente para quienes leen: la mayor responsabilidad, aunque pretenda relegarse únicamente a espacios escolarizados y culturales, recae en los padres.

Fragmentos.

Propuesta visual.

Hasta cierto punto de la historia, lo infantil -y todo lo relacionado con esta esfera- no era una noción presente en el lenguaje ni en otras formas de expresión de la cultura. La noción política de infancia, tal como la conocemos en nuestros días, ha sido una construcción gradual que ha tenido distintas apreciaciones a lo largo de la historia. La infancia se considera un descubrimiento reciente; producto de las sociedades modernas, hecho que le ha conferido un nivel de historicidad y un notable interés de tipo científico en la comprensión y ampliación de su estudio.

Entrevista.

Fragmentos.

Los esfuerzos  por formar lectores se enfocan cada vez más en el público infantil, mediante estrategias que anticipan el contacto entre el niño y el libro a edades cada vez más tempranas. El desarrollo del libro álbum infantil permite anticipar este encuentro hasta los límites prenatales, transformando el concepto del libro para niños en un objeto casi mágico que simboliza el basto universo infantil y lo reinventa creando nuevas posibilidades estéticas, didácticas y lúdicas a partir de una doble codificación de imágenes y textos.

En el siguiente artículo desarrollaremos un análisis de los actores socio-discursivos en la canción vallenata “Mujer conforme”, compuesta por Máximo Móvil e interpretada por Jorge Oñate, incluida en el álbum La parranda y la mujer lanzado en 1975. Según Van Leeuwen (2008), la razón por la que existen tantas formas de categorización de los actores discursivos es la recursividad que tiene el lenguaje para ordenarlos en sujetos “agentes” o “pacientes” y, a la vez, el hecho de que estas dos últimas clases no poseen una estructura gramatical estática, por lo que se pueden reconfigurar obedeciendo a las intenciones sociales del discurso.

El sistema educativo colombiano, conformado actualmente por la educación inicial, básica, media y superior, es heredero de una larga tradición conservadora. Por años, este sistema dio prioridad a métodos de enseñanza medievales propios de la escolástica. Aun cuando la ciencia se posicionó como estandarte de la modernidad y se intentó traerla al país, el sistema educativo dentro de las aulas continuó operando bajo metodologías pedagógicas tradicionales: la supremacía del libro como saber único y autorizado, la poca experimentación pedagógica, la distribución espacial en filas frente a un tablero, los castigos físicos a estudiantes, etc. En el siglo XXI, con la emergencia de las tecnologías de la información y la comunicación, algunos países han incorporado tecnología a los procesos de enseñanza-aprendizaje. En Colombia, sin embargo, el sistema educativo y las TICS mantienen una relación compleja debido al desarrollo desigual de las regiones y la gran heterogeneidad cultural. Por esta razón, hacer un diagnóstico homogéneo del uso de las TICS en el sistema educativo colombiano resulta problemático, pues en algunas regiones el acceso a la tecnología y la interconectividad es prácticamente nulo.

Apreciado lector, juguemos a que existe alguna manera de atravesar el Espejo. ¿Le gustaría entrar? Siga. Lo estábamos esperando con paciencia. Hemos dispuesto todo para su visita. No tema, se acostumbrará muy pronto al oxigeno que se respira en estas páginas. Lea atentamente, tome aire y atraviese el cristal. Del otro lado encontrará poetas, escritores, literatos, lingüistas, ilustradores... Observe con atención las imágenes que han creado para nosotros. A modo de guía recuerde estas preguntas: ¿Qué son las infancias? ¿Cómo ha sido pensada la noción de infancia a lo largo de la historia? ¿Qué implica escribir para niños? ¿Cómo animar a la lectura y qué retos asume el sistema educativo ante la emergencia de nuevas tecnologías? Le sugerimos formular sus propias preguntas, construir un dialogo. Si se encuentra con la poeta, la ilustradora o la escritora invitada, hable con ellas. Antes de adentrarse en la casa del Espejo, una última recomendación a los visitantes: no tema al extravío, camine por entre los párrafos y las páginas hasta llegar al final de la casa. Intente recordar su propia infancia: su juguete favorito, el olor de las almendras, su mejor amigo, la textura de la tierra y de las piedras, los juegos en el patio... ¿Está listo para atravesar el cristal? Agradecimiento especial a Irene Vasco, por su enorme disposición para la entrevista de este número. Y a Marisel Salazar, por dar vida a la portada de esta nueva edición de Espejo.